INGREDIENTES: 200 g de chocolate negro con 60% de cacao 200 ml de crema de leche 50 g de cacao amargo en polvo 2 cucharaditas de Rón, Whisky o Coñac. (Opcional) Esta receta se tiene que preparar con un día de anatelación.
1. Derretir la crema de leche y el chocolate en baño maría. Mezclar para obtener una pasta bien homogénea: ya está hecha la ganache.
2. Colocar la preparación en la heladera durante toda la noche.
3. El día siguiente, sacar de la heladera y volver a mezclar la ganache hasta obtener una masa cremosa. Armar una pequeña bola con una cucharita (y no con las manos)
4. Colocar la bolita de chocolate en un bol con cacao en polvo y mover el bol de manera que la masa quede bien recubierta de cacao. Repetir la operación hasta que se agoten los ingredientes. Conservar las trufas en la heladera antes de servirlas.
El secreto consiste en lograr una ganache fácil de moldear y sobretodo no tocarla con las manos. Es lo que hice al principio pero el chocolate se derrite con el calor corporal !
Las trufas fueron inventadas en 1895 por Louis Dufour, un pastelero de Chambéry, en los Alpes franceses. A vísperas de Navidad, se encontró sin golosinas y para resolver el problema inventó esta receta. Tuvo gran éxito y se convirtió en un clásico de las fiestas en Francia.
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